Qué bueno es saber que nadie te olvida, amigo José!
Aunque tu ausencia nos duele, seguimos viviendo como hubieras querido que lo hiciéramos.
Te recuerdo aún cuando eras alumno mío, a los dieciséis años, qué alumno tan maravimoso fuiste!
Qué bueno es saber que nadie te olvida, amigo José!
Aunque tu ausencia nos duele, seguimos viviendo como hubieras querido que lo hiciéramos.
Te recuerdo aún cuando eras alumno mío, a los dieciséis años, qué alumno tan maravilloso fuiste!
Qué bueno es saber que nadie te olvida, amigo José!
Aunque tu ausencia nos duele, seguimos viviendo como hubieras querido que lo hiciéramos.
Te recuerdo aún cuando eras alumno mío, a los dieciséis años, qué alumno tan maravimoso fuiste!
Qué bueno es saber que nadie te olvida, amigo José!
Aunque tu ausencia nos duele, seguimos viviendo como hubieras querido que lo hiciéramos.
Te recuerdo aún cuando eras alumno mío, a los dieciséis años, qué alumno tan maravilloso fuiste!